Blog Paleobull
¿El trabajo te agobia? ¿Sientes que no puedes más? ¿A veces te cuesta respirar? ¿No puedes concentrarte o pensar con claridad? Si es así, podrías estar padeciendo estrés, ansiedad o las dos al mismo tiempo. El primer paso para actuar consiste en distinguir entre ambas afecciones. Y es que la ansiedad, el tema que nos ocupa en este artículo, puede ser una consecuencia y un síntoma de estrés continuado.
Nuestra salud cardiovascular es algo que debería preocuparnos a cualquier edad y, sin embargo, no solemos prestarle mucha atención a nuestro corazón, ni en el aspecto físico ni en el emocional, que también influye. No obstante, la enfermedad cardiovascular representa la principal causa de muerte en los países desarrollados. Un problema que se agrava a partir de los 55 años. En el caso de las mujeres, la enfermedad cardiovascular produce más muertes que el cáncer de mama. Y el estilo de vida es la principal causa de este problema.
De la salud de nuestra microbiota depende no sólo nuestra salud intestinal sino la inmunológica y hasta la mental. Y es que nuestra flora intestinal está considerada nuestro segundo cerebro: lo que comes puede alimentar a las bacterias «buenas» de tu intestino, promoviendo una buena salud y un estado de ánimo positivo; o a las «malas», causándote déficits nutricionales, molestias digestivas y estrés crónico. Hasta la depresión y las enfermedades neurodegenerativas se han relacionado ya con una microbiota desequilibrada.
El buen tiempo y las vacaciones son la excusa para hacer ejercicio al aire libre, lo que multiplica las posibilidades, el disfrute y los beneficios. ¡Tus endorfinas están pletóricas cuando te mueves y ejercitas en el campo, en la playa o en un parque! Y si el aire que respiras está libre de humos y polución, los que te lo agradecen son tus pulmones y tus neuronas. Y es que el ejercicio outdoor multiplica los beneficios de la mente.