Esta técnica, conocida también como Técnica de Liberación Emocional o EFT por sus siglas en inglés (Emocional Freedom Techniques), fue desarrollada en 1980 por un ingeniero de sistemas, Gary Craig, discípulo del doctor en psicología Roger Callahan, quien había creado la Thought Field Therapy (TFT). Esta técnica se basa en principios de la medicina china y la acupuntura, pero Craig simplificó su aplicación, haciéndola más accesible y práctica.
La técnica creada por Gary Craig, que es la que conocemos como tapping, consiste en golpear con las yemas de los dedos ciertas zonas o puntos de acupuntura para liberar bloqueos, el estrés, la ansiedad o el dolor emocional. Se considera una especie de «acupresión psicológica» que actúa sobre los meridianos energéticos: mientras se estimulan estos puntos, nos enfocamos en la emoción o problema a tratar y repetimos ciertas frases o afirmaciones.
Los resultados del tapping están avalados por numerosos estudios con base neurológica, entre ellos, un metaestudio que analizó 50 investigaciones sobre esta técnica, publicado en la American Psychological Association, que mostró resultados positivos en la reducción del estrés y la ansiedad. Además, un estudio realizado en 2013 por la Journal of Nervous and Mental Disease mostró que las personas que practicaban tapping experimentaron una disminución del 24% en sus niveles de cortisol después de una sola sesión
Y es que el efecto del tapping es inmediato, puede practicarse de forma autónoma, es apto para cualquier edad y no tiene ningún efecto secundario. Si se realiza con la orientación de profesional cualificado, como un psicólogo, un terapeuta o un coach, puede ser aún más eficiente al combinarse con otras herramientas para tratar el problema de base que está ocasionando la sintomatología.
Beneficios del tapping
El tapping resulta muy beneficioso para liberar bloqueos y reducir el nivel de estrés y ansiedad. Pero también es muy útil para tratar adicciones y comportamientos compulsivos, eliminar creencias limitantes y mejorar la autoestima. Además, la terapia de EFT se emplea para tratar dolencias psicosomáticas y para aliviar el dolor físico.
A diferencia de otras terapias que pueden requerir revivir experiencias difíciles, el acercamiento en la terapia EFT es más suave y tolerable, reduciendo la carga emocional sin tener que forzar nada, ni revivir eventos traumáticos. Como tal, el tapping no es una «cura» para la ansiedad, pero sí es una técnica que ayuda a reducir sus manifestaciones.
Alguno de los principales beneficios:
- Reducción del estrés y la ansiedad. El tapping ayuda a liberar emociones negativas, lo que contribuye a una mayor sensación de calma y bienestar.
- Alivio del dolor físico. Puede ser útil para dolencias psicosomáticas y el dolor crónico, proporcionando alivio sin necesidad de revivir eventos dolorosos del pasado.
- Mejora de la autoestima y creencias limitantes. Ayuda a trabajar creencias negativas y a reforzar una actitud positiva frente a los desafíos.
- Versatilidad en su uso. Se emplea tanto para tratar problemas emocionales como el miedo, la tristeza o la culpa, así como para enfrentar adicciones, fobias, estrés postraumático y TOC.
- Aptitud para el desarrollo personal. Ayuda a gestionar mejor las emociones, potenciar la creatividad y mejorar la sensación de bienestar general.
- Alivio inmediato en situaciones de crisis. A diferencia de otras técnicas que requieren mayor tiempo de práctica, el tapping puede proporcionar un alivio rápido en momentos de estrés agudo.
Tapping vs. otras técnicas de relajación
El tapping se diferencia de otras técnicas de reducción del estrés, como la meditación o la respiración profunda, en su enfoque práctico e inmediato.
- Meditación. Requiere un estado de concentración y tiempo para generar resultados a largo plazo. Sin embargo, el tapping es útil para situaciones donde se necesita un alivio rápido, como antes de una presentación importante o durante un episodio de ansiedad.
- Respiración profunda. Es una técnica sencilla y efectiva para relajar el cuerpo. El tapping, en cambio, no solo se enfoca en la respiración, sino que también ayuda a procesar y liberar emociones, ofreciendo una solución integral.
- Mindfulness. Ayuda a la conciencia plena y al entrenamiento de la mente, pero requiere una práctica continua para su efectividad. El tapping permite un alivio emocional inmediato y es ideal para situaciones de crisis emocional.
Cómo practicar el tapping
El primer paso para practicar tapping es identificar el problema que se quiere abordar, ya sea una situación general que produzca ansiedad o una preocupación específica. Se mide el nivel de ansiedad en una escala de 1 a 10 antes de comenzar, y luego se golpean suavemente los siguientes puntos del cuerpo mientras se repiten frases positivas.
Los puntos esenciales que se golpean suave y repetidamente son la coronilla, las cejas, los costados de los ojos, debajo de los ojos, debajo de la nariz, el mentón, la clavícula, el pecho, los costados y las muñecas. Las frases se repiten varias veces mientras se van recorriendo estos puntos. Al terminar, se evalúa nuevamente el nivel de ansiedad para medir los resultados.
Para ponerlo en práctica date golpecitos en estos puntos hasta que sientas que han bajado de intensidad las sensaciones o emociones que tenías. Es muy importante hacer movimientos bilaterales utilizando las dos manos, específicamente los dedos índices, para estimular ambos hemisferios cerebrales, todo el sistema energético del cuerpo y tus órganos.
Los golpecitos deben ir acompañados de frases que te conecten con la emoción que estés sintiendo y que te calmen, por ejemplo, «estoy en paz», «mantengo el foco», «estoy en calma», «estoy a salvo». De 5 a 10 minutos al día son suficientes para conseguir beneficios y notar una mejor en tu estado emocional.
Se asemeja a una acupuntura sin agujas, ya que se estimulan puntos tradicionalmente tratados en la acupuntura, pero de una manera no invasiva y fácil de aprender, sobre todo para niños o personas que prefieren evitar las agujas, ayudándoles a relajarse de forma inmediata.
La clave es practicarlo de forma regular, cada vez que comiencen a aparecer los síntomas, incluso si no son intensos. Puede incluirse como parte de una rutina diaria de bienestar, en momentos de estrés, antes de dormir o incluso en el trabajo.
El poder del tapping radica en su simplicidad y en que no requiere profundizar en traumas o emociones complejas. Es accesible para todos y puede ser especialmente beneficioso para niños por su facilidad de uso. Aunque es una herramienta maravillosa para gestionar el estrés y la ansiedad, es importante recordar que no sustituye a la terapia psicológica profesional.