Desde hace unas semanas, hemos empezado una etapa con una serie de normas preventivas, que debemos seguir en el día a día y a las que tenemos que adaptarnos. En este nuevo escenario, volver a las rutinas y recuperar el hábito de practicar ejercicio puede que nos cueste más que antes.
Y es totalmente normal. Si bien no poder ir al gimnasio, al box o al lugar preferido para hacer ejercicio fue una de las limitaciones que a muchos más les costó aceptar durante el confinamiento, regresar ahora no es tan fácil como se pensaba.
No te preocupes, todos estamos en el mismo barco. Quizás el gimnasio o lugar de entrenamiento se haya vuelto un espacio un poco intimidante en estos momentos. Por eso te ofrecemos algunas recomendaciones para que la transición sea lo más fácil posible.
Empieza por lo básico
Si vuelves al gimnasio después de tres meses de estar en tu casa, te recomendamos volver a las rutinas más básicas y menos elaboradas. Piensa que para tu cuerpo es el primer día del colegio. Aunque te hayas mantenido activo, tienes que dejar que tus músculos se acostumbren otra vez a los patrones de movimientos y sentir que tu mente los domina de nuevo.
Trátate suavemente
Es decir, la intensidad, pesos y duración de los entrenamientos iniciales deben de estar en el orden de lo suave-normal. Porque si pretendes empezar con tu máxima carga, sesión de HIIT y un trote todo al mismo tiempo, al final de semana te dolerán hasta las pestañas.
Empieza con lo que más disfrutes
Sabemos que es más fácil empezar por lo que más nos gusta. Por ello, no planifiques al inicio los ejercicios o rutinas que menos te gustan y déjalos para más adelante. Así conseguirás disfrutar más de tu sesión de entrenamiento. Juega un poco, incluye movimientos que te reten y te den la expectativa de lo que vendrá en un nuevo entrenamiento, como puede ser una sesión de Kettlebells. Cuando ya te sientas listo para el paso siguiente, incluye más ejercicios -también esos que no te gustan tanto- en tu programa.
Si tu gimnasio tiene nueva normativa, acostúmbrate a ella
Muchos gimnasios exigen el uso de mascarillas en las salas de pesas y otros espacios. Además, hay que usar gel desinfectante todo el tiempo y limpiar el lugar de trabajo o equipo de ejercicio al terminar el serie. Incluso están están prohibiendo entrenar en pareja. En este sentido, aunque nos lleve algo más de tiempo, deberemos incluir estas medidas en nuestros entrenamientos.
Prepárate para dormir mejor
Un sueño reparador es básico para empezar el día con energía. Evita usar el móvil antes de irte a la cama, tómate una infusión y entrégate a los brazos de Morfeo. De este modo tu cuerpo se sentirá fresco y evitarás el cansancio antes de tus sesiones de entrenamiento.
La alimentación e hidratación es fundamental
Es hora de darle el mejor combustible a tu cuerpo, y llenarlo con alimentos de calidad que faciliten la recuperación y mejoren el rendimiento. Y sabes que esto no quiere decir comida aburrida. Hay opciones saludables como barritas energéticas, cremas y proteína en polvo que además de los nutrientes adecuados, le darán el sabor delicioso que necesita tu dieta.
Y por último, recuerda buscar apoyo en tu tribu y piensa que todos estamos en el mismo barco a la hora de enfrentar los nuevos retos que se avecinan. En un par de semanas, verás como has recuperado la rutina y, ¡tu salud te lo agradecerá!
Foto: ijeab